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designación tendrán que ser siempre las victimas
elegidas de su venganza.
No sucede lo propio cuando el nombramiento re¬
cae en un vecino propietario y negociante relaciona¬
do de esa localidad digamos asi, à la cual lo ligan siem¬
pre vinculos estrechos y poderosos, pues es alli donde
tiene el centro de sus mas caras afecciones, alli tiene
su propiedad sus intereses, todos y lo que es mas aun
siendo este el lugar de su nacimiento inspirará en él,
el amor que siempre inspira la patria, pudiendo de¬
sempenar sus funciones, comó lo haria administran¬
do lo que le pertenece consiguiendo con esto adquirir
mas preponderancia y aprecio y robustecer las sim¬
patias que lo unen à la sociedad donde reside y con¬
tinuaré residiendo, una vez terminadas sus tareas.
No pueden serle objeto de desprecio los juicios de
esa pequena agrupación que puede castigar sus erro¬
res con severa censura y aun con el olvido de su
nombre.
«El poder municipal ocupa un inmenso lugar, en
las instituciones publicas, y si bien colocado debajo
de los otros poderes del estado, no es, sin embargo
menos importante y es mas antiguo que ellos; por
que desde el momento que sé constituye un pueblo
por insignificanté que sea, desde el instante que una
asociación de personas forma una aldea, se hace sen¬
tir la necesidad de su administración interior. El
poder municipal es pues el primero cuya necesidad
conocemos, es por consiguiente anterior al estado.
Los legisladores han podido variarle, modificarle, al¬
terarle en un sentido mas ó menos restrictivo, pero
no han podido crearle, no han podido formarle, por
que creado y formado lo han encontrado sin duda
para que le sirva de cimiento sobre el cual debian
levantar el edificio social».
INHIDE
Max-Planck-Institut für
INSTITUTO DE INVESIIC
GONES
DE HISTORIA DEL DERE
europäische Rechtsgeschichte