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que la policia debia ser esencialmente popular y ejercida en 
turno por todos los ciudadanos, porque este seria acaso el unico 
medio de propiciarle el favor de la opinion, una vez que, hacer 
impecables los ajentes no es obra de hombre, á lo ménos con 
los sueldos usuales. 
Por otra parte, desprestigiar la policia, es desmantelar el 
techo que nos abriga, es romper los cercos que encierran y de 
fienden las propiedades; hacer al pueblo enemigo de la policia, 
es hacer rebeldes à los mansos y dar vuelo á los reacios para 
que sean peores, es sembrar animosidades para cosechar des¬ 
gracias. 
La esperiencia diaria muestra no obstante, que los mismos 
que mediante la policia son respetados, gozan de lo suyo, re¬ 
cuperan lo perdido y hacen castigar á los que los ofenden, están 
prontos para arrastrar ante los tribunales al agente que haya ul¬ 
trapasado, siquiera sea en un àpice, sus facultades; para acusar 
ante la opinion, el mas terrible de los jueces, porque dá su vere 
dicto apasionado sin oir á las partes, al ultimo gendarme que 
procediendo de las mas bajas esferas sociales, es por lo comun 
hombre rudo é ignorante, mezquinamente retribuido para tener 
las cualidades que se le exijen, y en quien las torpezas son tan 
propias y naturales, que el asombro y la indignacion que des¬ 
piertan, no se esplican sino por animosidad prévia. 
NNHIDE 
Max-Planck-institut fü 
INSTITUTO DE INVESTIG 
CIONES 
europäische Rechtsgeschichte 
L DERECHO 
DE HISTORA DE