Obligada prepa¬
ración de la
acción social.
Panorama de fu-
turo porvenir.
Max-Planck-Institut für
europäische Rechtsgeschicht
es inagotable y el ciclo de su reconstitución se cumple con
tal perfección, que, sin cesar, la Naturaleza nos ofrece de
nuevo sus aportaciones, sin cansarse de invitarnos al pleno
goce de cuanto puede producir.
Todo ello justifica la constante preocupación de la poli¬
tica nacional en cuanto se relaciona con estos problemas, en
todos los conceptos, de orden laboral, de organizaciones
sociales, trabajo, producción, transporte, distribución de
población y productos, lo que, en su conjunto, forma la es¬
tructura econômica y social en que la vida individual y co¬
lectiva se desarrolla; y ello obliga a todas las clases direc¬
toras a cooperar con especial empenno a la acción gubernativa,
la que podrâ encontrar caudal importantisimo de fundamen¬
tos para los preceptos y leyes que haya de dictar en cuanto
las ilustres personas que cultivan estas ciencias pueden
aportarle como fruto de sus estudios y desvelos.
El panorama descrito, en el que se dibuja ya el bello
paisaje de realidad que ansiamos contemplar, coloca en plano
de preferente actualidad a cuanto puede contribuir a la
mayor eficacia y mayor estimulo de los trabajos, prepara¬
ciones y esfuerzos que nos conduzcan a fines tan primordia¬
les de nuestra propia existencia y del esplendor de nuestra
Patria.
No hay que estimar como fantasias de la imaginación,
sino como noble alegria del alma, pensar que en esa fecha,
ya no remota, las aguas de nuestros rios irán de presa en
presa, derivándose por canales, pasando divisorias y en
ritmica canción de felices promesas llegarâ a cumplir la ge¬
nerosa misión de fertilizar magnificos vergeles en los que
habitaran quince millones de espanioles; el rodar de las tur¬
binas transformarâ la energia de las aguas en energia elèc¬
trica, que se desplazarâ en todos sentidos para mantener en
equilibrio y marcha continua el trabajo y la industria en
todos los ámbitos del pais, ayudandose fraternalmente todas
las regiones; los campos de secano, praderios y montes, por
la prosperidad del pais e impulso industrial, dispondrán de
cuanto necesiten para su mejor desarrollo y podran sostener
una población de diez millones de habitantes; la industria,
ampliamente dotada de energia y medios de transportes,
logrará que se pueda conseguir la autosuficiencia deseada, y
los quince millones de población fabril y urbana completa¬
ran los cuarenta de espannoles que poblaran el solar que nos
legaron nuestros mayores, el que, cruzado en toda su ex¬
tensión por fâciles medios de comunicación, mantendrâ en
Real Academia
prales y Politicas