DISCURSO
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los muebles. Reconocemos la lucha de clases como un hecho;
pero la rechazamos, y aspiramos a que cese, no sôlo por ser
anticristiana, sino también por atentatoria al bien de la so¬
ciedad» (13). Aun dentro de la más perfecta armonia, el régi¬
men del salariado mantiene siempre a los obreros en una si¬
tuación de inferioridad social respecto de los patronos, abso¬
lutamente disconforme con la doctrina de la fraternidad
cristiana, y se presta a convertir en dádivas, hijas de la com¬
pasión, las santas reivindicaciones de la justicia. «La compa¬
sión — hemos dicho en uno de nuestros estudios sociales
es ciertamente un sentimiento digno de todo respeto, cuando
se halla informado por la caridad cristiana: compadecer es,
en efecto, compartir con el prójimo los dolores, por amor fra¬
ternal en Dios, y, asi entendida la compasión, es una virtud
provechosa para el que la siente y para el que la recibe, pues
como ha dicho D." Concepción Arenal, «el dolor es el gran
maestro de la Humanidad..., espiritualiza al hombre mås gro¬
sero..., levanta al caido, abate al fuerte, confunde al sabio.
inspira al ignorante..., purifica lo que estâ manchado, santi¬
fica lo que es bueno y diviniza lo que es santo...; pero el do¬
lor, sin compasión, en vez de moralizar, deprava, y'no es un
elemento de moralidad sino a condición de ser compadecido
y consolado». Asi entendida la compasión, es un dulce eflu¬
vio de los nobles espiritus, y, al propio tiempo, una afirma¬
ción de la solidaridad humana para el dolor, solidaridad que
en la filosofia cristiana tuvo su expresión en aquellas pala-
bras de la primera Epistola de San Pablo a los Corintios: «Si
algun mal padece un miembro, todos los miembros padecen
con él», y que el pesimista Schopenhauer formuló también
diciendo que «la compasión es un acto de fe en la identidad
de todos los seres humanos». Mientras la compasión no tenga
esta transcendencia caritativa, no pasarä de ser una estéril
reacción impulsiva, inconsciente y casi fisiológica contra el
dolor ajeno. Conviene fijarse en la psicologia de la compasión
para evitar que, tomada como solución ûnica de las miserias
sociales, sea a modo de un paralizante de toda acción enérgi¬
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les y Politicas
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