Max-Planck-Institut für
europäische Rechtsgeschichte
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DISCURSO
para que sea licito presentar en este recinto su critica.
Compréndese que las repûblicas no hayan resistido
la invasión del principio democrático que vengo exa¬
minando, y hayan acabado por abrirle de par en par
las puertas de sus Constituciones; pero la mejor prueba
de que aun en ellas, y como expresión de la soberania
popular en ejercicio incesante, se le juzga imperfecto y
se le teme, està en los correctivos y compensaciones
que por todas partes se buscan á sus efectos.
Tampoco me queda espacio más que para hacer de
ellos una enumeración sucinta.
Propónese, en primer término, el sufragio indirecto
ó de dos grados, defendido por tantos escritores en
Francia, desde Tocqueveille hasta Taine 2, y practi-
cado más ó menos sinceramente en los Estados Unidos
para las elecciones presidenciales. Mas aunque no pue¬
de negarse que ofrece algunas garantias contra la
ignorancia y las pasiones, lo rechazan en general los
tratadistas como contrario á la verdadera representa¬
ción y susceptible, asi de ser fácilmente burlado, como
de dejar el poder electoral en manos de las minorias.
Las varias formas del voto plural y el voto acumula¬
do, los ingeniosos sistemas de la representación pro-
porcional, el de unidad de colegio de Girardin, los di-
versos de simple pluridad de sufragio, el de cociente
con transferencia de votos del Ministro danés Andræ y
el más conocido del escritor inglés Hare, las combina¬
ciones dirigidas à asegurar la representación equitativa
de los partidos, el de sufragios acumulables, el de listas
concurrentes, el de doble voto simultáneo por partidos
y personas de Fisher y Borely, el de divisor comun de
1 Véase la comparación entre el Congreso y el Senado de los Estados
Unidos en La democracia en América.
2 Du suffrage universel et de la manière de voter.
Real Academia de Ciencias Morales y Politicas