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DISCURSO
Se necesitan extraordinarios alientos y grandes re-
cursos para empenarse en debates de tanta altura, muy
del agrado de aquellos hábiles discutidores y profundos
tratadistas de los siglos XVI y XVII; del misionero Juan
Fuente y el Excmo. Sr. D. Manuel Colmeiro, elocuentes disertaciones acerca
del cuarto tema, citado en el texto, observando el primero que: “ Vivimos en
una época de transición; en tales ocasiones suele acontecer que se pretende
curar los antiguos extravios con errores nuevos. Por uno de tantos considero
el llamado impropiamente sistema americano, que remedando à los Estados
Unidos sin saber imitarlos, proclama la separación completa de la Iglesiay
del Estado, y pretende gobernar los paises católicos latinos con la politica de
los germánicos protestantes, que no tienen Iglesia, sino iglesias, por no decir
sectas. Asi que la teoria moderna, que encomia la separación de la Iglesiay
el Estado, se agita en Espana, no por sentimiento general, sino por remede
sistemático y de partido, y agita igualmente à otros paises. „ E insistiendo en
ello agregaba el Sr. Colmeiro:" La separación de la Iglesia y el Estado, si es
absoluta, equivale à la proclamación del ateismo oficial. Todo pueblo necesita
un simbolo, y todo simbolo una fe y una autoridad. En pos de la negación
religiosa viene la negación politica, y con ella la disolución y ruina de los
pueblos. Tan imposible es la existencia duradera del Estado, fuera de la Igle¬
sia, como la vida del hombre, cuando falta al cuerpo el espiritu que le anima.,
4 Oposición fundamental entre la civilización religioso-cristiana y la racio-
nalista. „ Tal fué la tesis elegida por el Ilmo. Sr. D. José Moreno Nieto para
su recepción en esta Real Academia. En el brillante discurso que leyó el 25 de
Mayo de 1879, sostuvo que “ el Estado debe promover, si, desde sus alturas y
por medio de las instituciones por él creadas, el trabajo de reconstrucción
cristiana, se entiende, con espiritu de verdadero progreso y con la aspiración
à continuarle, segûn el verdadero concepto del destino, asi el ultramontanc
como el temporal de la vida toda; pero debe de dejar que bajo de él y al lado
de esas instituciones se creen y nazcan otras, y dentro de éstas ó fuera de
ellas, que se desenvuelvan libremente las varias direcciones empezadas. „ Y
luego anadia: " Esta mi profesión de fe politico-religiosa será tal vez dura-
mente tratada por los unos, como inficionada en su sentir de racionalismo por
los otros, à causa de lo que llamarán su tendencia mistica y autoritaria.....
Pero recuerden los primeros aquellos un tanto vagos, pero solemnes anuncios
del Conde de Maistre, cuando levantándose sobre la negra confusión, y el
desorden y las tristezas de estos revueltos tiempos, decia con voz que parecia
hacer revivir la de los antiguos profetas: Todo anuncia yo no sé qué grande
unidad hacia la cual marchamos à grandes pasos. » En cambio, el Sr. Colmeirc
hallaba la fórmula de la conciliación en la libertad, afirmando que "La liber
tad, que en manera alguna esté renida con el catolicismo, porque el dogma
y la moral de la religión cristiana son la fuente pura de todas las virtudes
publicas y privadas, asi como del derecho y la justicia; la libertad, que à
pesar de sus extravios, es un principio de vida y la respiración de la sociedad
moderna, es también la unica senda practicable para acercarnos al ideal de
Estado, cuya organización serå tanto mås perfecta, cuanto mås se aproxime à
la del hombre.,
Max-Planck-Institut für
) Real Academia de Cencias Morales y Polticas
ropäische Rechtsgeschichte