Max-Planck-Institut für
europäische Rechtsgeschichte
DISCURSO
Tendrá en Espana la ensenanza con la existencia de
una religión del Estado una ventaja para la Iglesia, cier-
tamente no comûn, pues que la câtedra oficial, cuando la
Instrucción püblica se halle fuertemente organizada, no
podrá convertirse en un lugar de propaganda de la im¬
piedad, y debe bastarla, si resguardado hasta donde sea
posible este terreno, franco en muchas partes para las
teorias, llamadas cientificas, se la concede un campo li¬
bre donde ejercite su influencia por medio de la ensenan¬
za, difundiéndola sobre todo, si á esto acompana la exis¬
tencia de congregaciones religiosas no perseguidas, sino
autorizadas, ó cuando menos consentidas, que puedan
encargarse de utilizarla, aplicándose å la Instrucción de
la juventud.
De una manera práctica estâ ocurriendo lo que indico;
pero la falta de organización de la ensenanza con todos
los caracteres indispensables de la libertad, dificulta las
relaciones entre la libre y la oficial, y cada vez va ha¬
ciéndose la resolución del problema más urgente, si se
considera que la reforma no puede ser obra de un dia, que
en ella han de intervenir las Cortes, donde este género
de discusiones son siempre amplias y tropiezan con gran¬
des dificultades, que nacen de la diversidad de pareceres
en una materia tan compleja, en que tantos intereses y
principios opuestos tienen que dilucidarse, sobre todo,
cuando la opinión no está formada por completo y que¬
dan de una parte el temor de lo que recientemente fué
la libertad de ensenanza en Espana, y de otra, la preten¬
sión de las escuelas extremas de uno y otro bando, de
apoderarse en absoluto de la Instrucción pûblica.
La Iglesia en Espana conserva en verdad el propósito
de dominar en los centros de ensenanza; pero no lo hace
con el empeno y la insistencia que pareceria propio de
sus condiciones esenciales; por el contrario, las escuelas
materialistas, las ateas, en una palabra, las libre-pensa¬
sy Politicas