grandes ciudades, en viviendas higiénicas y baratas. Pero de 
cumplir estrictamente los deberes que las leyes municipales 
de todos los paises senalan a los Ayuntamientos, on cuanto 
se refiere a la higiene y a la salubridad, a construir casas en 
solares adquiridos o en los que ocuparon las viviendas derri¬ 
badas gubernativamente por insalubres, hay una gran dis¬ 
tancia, que el Ayuntamiento de Londres, autorizado por el 
Parlamento, en este caso con obligación impuesta, resolvió 
saltar, acometiendo la magna y sin duda, a mijuicio, ineficaz 
empresa de proveer durante veinticinco anos 16.000 habita¬ 
ciones para una población de más de siete millones de habi¬ 
tantes; o sean en total unas 400.000 habitaciones. Esto no es. 
como observa un comentarista, sino empezar a tratar ol 
asunto. 
Mas es, sin duda, éste, un caso de industrialización muni¬ 
cipal, que aun sin monopolio, resultó de hecho, puesto que 
el capital destinado a la construcción se retrajo; quedando el 
Ayuntamiento sólo en la costosa empresa de, con empréstitos 
al 3 por 100 y amortizables en sesenta anos, proporcionar 
casa, segün resultó de una información practicada, a obreros 
mejor pagados, a obreros favorecidos por la influencia y 
desde luego a ninguna de aquellas personas para las que fue¬ 
ron edificadas, cuando por insalubres se derrumbaron gu¬ 
bernativamente los albergues que ocupaban. Es ésta una 
nota desagradable de la extensión de funciones municipales, 
aparte de las enormes sumas gastadas con un resultado bien 
pequeno, dado el reducido nûmèro de los favorecidos. 
El procedimiento inglés no fué el seguido en Nueva York, 
donde se estimó que tal extensión de funciones podria ofre¬ 
cer ancho campo al agio y al favoritismo; siendo preferible 
proteger la construcción de viviendas modestas por medios 
indireotos; sistema que ha practicado Italia, mediante la crea¬ 
ción de institutos autónomos y sociedades subvencionadas, 
pudiendo los Ayuntamientos construir casas baratas sólo en 
el caso de que esas asociaciones no lo pudieran realizar; Bél¬ 
gica, donde para neutralizar la viva oposición a la municipa¬ 
lización de tal servicio, se constituyeron sociedades anónimas 
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europäische Rechtsgeschichte