un querido amigo: el excelentisimo senor don Ignacio de Casso y Ro¬
mero.
La misión de hacer el elogio de quien nos precedió en el curso
de la vida y que goza ya del eterno reposo, misión siempre conmo¬
vedora, lo es muy sigularmente para mi en el caso presente. Don Ig¬
nacio de Casso, ya lo he dicho, era un amigo y companero muy que¬
rido. Catedrâtico de la misma disciplina que él profesó, tuve el honor
de que fuera juez en mis oposiciones, lo traté asiduamente en los
tensos anos del Alzamiento Nacional, fuimos companeros de claus¬
tro y vecinos de la misma casa en los ultimos anos de su vida.
Sucedió Ignacio de Casso en la medalla académica que me toca
llevar, a don Felipe Clemente de Diego, el inolvidable maestro, el in¬
comparable humanista del Derecho, el que, ya lo dije en cierta oca¬
sión, habia sido para tantos de nosotros, para Ignacio de Casso como
para mi entre ellos, la viva encarnación del Derecho como arte de lo
justo y de lo bueno.
Ignacio de Casso fué discipulo estimadisimo de don Felipe Cle¬
mente de Diego y digno continuador de su magisterio docente, de su
depurada labor cientifica, de su pulcro ejemplo moral.
Hijo de catedrático de Universidad, jurista y universitario por
tradición y por vocación, Ignacio de Casso fué muy joven catedrá¬
tico de la Facultad de Derecho de Sevilla. Durante toda su vida sir¬
vió su vocación docente con verdadera entrega, primero en Sevilla,
mas tarde en Madrid.
Enriqueció la ciencia del Derecho de nuestra patria con numero¬
sas obras y publicaciones. Quiero destacar en primer término sus es¬
tudios doctrinales, de gran interés filosófico
juridico, tales como
"Los modernos siste¬
El Derecho civil en la Summa Theologica"
mas juridicos” o "El Derecho y su dinámica , obra madura y aca¬
bada que ofrendó como discurso de recepción a esta Real Academia.
En el campo más estricto del Derecho civil produjo importantes
tratados, como sus "Nociones de Derecho civil", o su “ Derecho civil
espannol comun y foral", o su “ Derecho Hipotecario y del Registro de
la Propiedad", que goza de tan merecido renombre. A estos trabajos
se agregan muy valiosas monografias, especialmente en materia de
Derechos reales y Derecho sucesorio.
Su actividad al servicio del Derecho en la ciencia y en la vida
se extendió a todas las esferas: de la cultura, de la administración,
Max-Planck-Institut für
Real Academia de Ciencias Morales y Politicas
europäische Rechtsgeschichte