pericia, los nuevos elementos incorporados al Ministerio, al 
que dieron evidente prestigioso relieve. 
Asi me fué dable ser testigo de los desvelos y entusiasmos 
de Aunós por la reforma social. El dice, modestamente, ha¬ 
blando de su labor: «Toda esta ingente obra no es atribuible 
ni la reclamamos como integramente nuestra. Mi mayor suer¬ 
te fué haber podido hallar colaboradores capaces y estima¬ 
bles, quienes se identificaron conmigo, rindiéndome un trabaje 
revalorizado por la corriente de simpatia que nos unió mutua¬ 
mente... A ellos ofrezco los éxitos si los hubo.» 
El Ministerio, con la dinámica tarea que le daba sin cesar 
Aunós, incansable y entusiasta, ganó en el interés de las gen¬ 
tes y fué uno de los que más hablaron desde la Gaceta, pero 
fuerza es confesar que la mayor parte de esas gentes hablaron 
contra la Gaceta para criticar, a veces violentamente, al Mi¬ 
nisterio de Trabajo. Las acusaciones de «plataforma de extre¬ 
mismos, socialisteria» y otras por el estilo subieron de punto 
y elevaron el tono de voz, y, ya que la ocasión se presenta, 
ha de sernos licito salir al paso de imputaciones sin funda¬ 
mento serio. 
Veamos quienes fueron los rectores de esta terrible orga¬ 
nización administrativa presentada por algunos como antro 
socialista. 
Desde su fundación, en mayo de 1920, hasta la caida de la 
Monarquia, en 1931 (1), o sea en un periodo de cerca de once 
annos, hubo nueve Ministros de Trabajo. Descontados Aunós 
y yo, que al ocupar el cargo no militábamos en ningun par¬ 
tido politico, aunque era notoria nuestra significación neta¬ 
mente conservadora, cinco de los siete Ministros restantes per¬ 
tenecian al partido conservador y sólo dos al liberal, que, cier¬ 
tamente, no pasará a la historia como ejemplo de demagogia 
(1) Un unico ministro socialista hubo durante la etapa republicana (abril 
de 1935 a julio de 1936) y, dentro del carácter de la situación politica, puede 
afirmarse que, sin que sea fâcil saber por qué, la Repûblica mantuvo el crite 
rio de llevar a ese Ministerio a personas de tendencia conservadora. 
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Real Academia de Ciencias Morales y Politicas 
europäische Rechtsgeschichte