Full text: Suarez de Tangíl y de Angulo, Fernando: ¬Las obras publicas en España y los gobiernos de autoridad

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gratuita (en anexo nûm 2 se refleja la correspondiente es¬ 
tadistica). 
iPermaneció más tiempo del promedio general de los 
Ministros de Fomento al frente de su departamento? De 
los que figuran en el cuadro anexo es el nûm. tres y, por 
consiguiente, en el promedio de vida ministerial figura à la 
cabeza, por lo menos con el tiempo necesario para que pu¬ 
diera desarrollar sus ideas. Es indudable que el gobernante 
necesita un minimo de plazo, que no es el que en ese pro¬ 
medio han tenido los Ministros que resenno, pero tambien 
es indudable que si algunos de ellos y aun de los mas des¬ 
tacados por sus cualidades personales o experiencia politi¬ 
ca hubieran cubierto el plazo de Guadalhorce, tampoco ha¬ 
brian dejado las huellas de éste; no doy a la permanencia 
del gobernante una importancia decisiva, sino despuès de 
un cierto limite, porque no se trata de un curso adminis¬ 
trativo o de doctorado. Desgraciados de los pueblos que 
padezcan como rectores a jóvenes aprendices, ensayistas o 
aficionados y que olviden que, como decia la inmensa men¬ 
talidad latina de Mussolini: "Gobernar significa tener la 
visión de todas las necesidades de la nación; gobernar sig 
nifica sentir latir en el propio corazón el corazon de todo 
un pueblo 
Siempre he sostenido que un quinquenio es plazo de 
tiempo ajustado para que un hombre con preparacion po¬ 
litica generalizada y particularizada a especialidades de 
ejercicio, o de práctica afinidad, dé de si todo cuanto su 
programa contenga, y que la continuaciòn por mas tiempo 
en los cargos lleva consigo, por lo general y salvo excep- 
ciones contadisimas, estériles resultados, cuando no noci¬ 
vos o contraproducentes por la humana tendencia a la ar¬ 
bitrariedad, seguridad de continuación e irresponsabilidad; 
por tanto, y porque el gobernante no estâ para elaborar 
la norma reglamentaria, potestad de otros elementos de la 
propia administración, ni la minucia del despacho y firma 
diaria, para la cual bastaria un autómata y un cajetin (que 
es en lo que han creido muchos Ministros consistia su pa¬ 
pel, por no decir su función), sino para lanzar ideas a sus 
técnicos y colaboradores, contrastarlas, meditarlas, y una 
Max-Planck-Institut fü 
ales y Politicas 
europäische Rechtsgeschich
	        
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