Full text: Redonet López-Dóriga, Luis: Tesis: El trabajo manual en las reglas monásticas

DISCURSC 
dió la riqueza de 14.000 ovejas, 6.000 camellos, 1.000 borri¬ 
cas y 1.000 yuntas de bueyes (Job, XLIII, 12). No se extrane 
tan crecido nûmero de pollinas, pues el asno, unido hoy con 
el buey en los sarcasmos de una fraseologia burlona, fué 
también objeto de atención en los libros santos. Tus toros y 
pollinos que labran la tierra—dice Isaias—comerän mezcla 
de granos (commistum migma comedent) como fueron aventa 
dos en la era (XxX, 24), es decir, segûn comenta Scio de San 
Miguel, de grano puro, bien limpio, que se avienta con pala 
y zarandas, mezclado en sus especies de trigo, cebada, ave¬ 
na, alverja y lentejas, y acostumbradamente proporciopado 
como sabroso regalo, à las bestias de trabajo, en los anos fér 
tiles (12). 
Bienaventuranzas, harturas y prosperidades siguen pro- 
metiendo los viejos santos libros à quienes trabajen, y penu¬ 
ria ó necedad à quienes se entreguen à la molicie del ocio. 
Bienaventurado serås y te irâ bien, si comes del trabajo de 
tus manos (David, CXXVII, 2); el que labre su tierra, se sacia¬ 
râ de pan, mas quien ame el ocio, es muy necio (Prov., XII, 
11; Eclo., XX, 30); el perezoso que no quiso arar por causa del 
frio, mendigará en el estio, y no le será dado (Prov., XX, 4); 
labra cuidadosamente tu campo para que después edifiques 
tu casa (Prov., XXIV, 27): mira a la hormiga joh perezo- 
so! y considera sus caminos y aprende sabiduria, pues ella 
que no tiene guia, ni maestros, ni caudillos, previene su sus¬ 
tento allegando en el tiempo de las mieses lo que luego ha 
de comer (Prov., VI, 6, 7 y 8). Y no se olvidaron de la mujer 
los Proverbios salomónicos, pues al trazar un elogio de la 
discreta y hacendosa, dicen que buscó lino y lo trabajó con 
la industria de sus manos: que del fruto de sus manos plantó 
una vina: que sus manos recibieron el lucro de los trabajos 
penosos en que se emplearon: que no comió, ociosa, el pan 
(XXXI, 13, 16, 19). Mujer admirablemente representada por 
Ana, la de Tobias, que iba diariamente á tejer telas, y se 
agenciaba lo que le era dable, para vivir con el trabajo de 
sus manos (Job, II, 19). 
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Real Academia 
ias Morales y Politicas 
europäische Rechtsgeschichte
	        
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