73
diciones. jUn consumo, dice Ludlow, citado por Piernas
Hurtado, que conduce a la propiedad inmueble, casas que se
adquieren comiendo; he aqui verdaderas paradojas económi¬
cas que ni Adam Smith ni Say habiau previsto!
En nuestra amada Espana, por desgracia, sólo aventaja-
mos a Holanda y Portugal en el nûmero de instituciones
cooperativas. Estamos todavia en el periodo de propaganda,
de la que fué convencido apóstol el insigne Piernas Hurtado,
allá por el ano 1890. Hasta se carece de datos estadisticos
exactos de su existencia. Ahora, varios dignos y beneméritos
sacerdotes han tomado para si la loable misión de constituir¬
las, y ya son bastantes, mas no todas las que debieran for¬
marse, las que funcionan, especialmente en las regiones
catalana y valenciana. Pero sabido es que, excepción de al¬
gunas, muy contadas, que no cito por temor de omitir inde¬
bidamente alguna, que llevan vida próspera y desahogada,
la mayoria carecen de radio de acción y de importancia, por
el escaso nûmero de socios cooperadores, por lo limitado de
de sus fines y por el exiguo capital de que disponen. Ha sido
muy lenta la aparición en Espana de estas instituciones.
Apenas en medio siglo, desde el nacimiento de las mismas,
se constituyeron 100 cooperativas de consumo y de crédito.
En cambio se registra el hecho de que en ese tiempo han
fracasado varias, que se han visto obligadas a liquidar, algu¬
nas sin dar cuenta siquiera a los socios cooperadores. Un
sincope las debió matar (1).
(1) Tanto es asi, que en la estadistica del Instituto de Reformas So¬
ciales de 1908 no aparecen más que 182 cooperativas de consumo, con
un total de 28 944 socios, de las cuales 67 estaban formadas por obreros,
y 5 por empleados y militares, resultando 155 cooperadores por cada
100.000 habitantes. No tan exiguas eran las cifras que los Sres Salas
Antón y Piernas Hurtado publicaron, por entonces; la del Sr. Salas An-
tón daba 140 cooperativas en Cataluna y 90 en el resto de Espana; la
del Sr. Piernas 263, de las cuales 225 de consumo, y 115 en las demás
provincias del Reino. Cierto que desde 1908 ha aumentado el nûmero
de estos organismos, realizando con mayôr eficacia sus fines sociales;
pero hay todavia mucho camino que recorrer antes de lograr la finali-
dad perseguida. En 1917 se publicó otra estadistica, y por ella se advierte
cômo el ideal cooperativo se abre poco a poco camino entre las clases
Max-Planck-Institut für
Academia de Ciencias Morales y Politicas
europäische Rechtsgeschichte