mada ahora, al correr de los tiempos, de que fuese cual fuese
el rumbo que el Estado adquiriese más tarde, los jalones pri¬
mordiales de aquella actuación se habian instalado en la vida
y conciencia nacionales con imperecedero carâcter.»
Al repasar su labor ministerial en lo que tiene de más ca¬
racteristico y resonante, lo corporativo, ya que para un reco¬
rrido de conjunto de todas sus realizaciones no disponemos de
espacio, hallamos confirmada esa su laudabilisima preocupa¬
ción social. Asi en el prólogo de La Reforma Corporativa del
Estado nos dice Aunós cómo concibió la idea de «arbitrar una
formula que hiciese imposible la perpetración de injusticias,
que diese término al desenfreno y abuso de poder, que reme
diase la insolidaridad de los espanoles, cuyo temperamento les
convierte en fácil presa de la rapacidad de unos cuantos».
He de detenerme, el discreto espacio de tiempo que baste
a no abusar de vuestra atención, en la glosa de aquella parte
del discurso de Aunós que se refiere al empenno dictatorial por
establecer la Organización Corporativa Nacional, y me tomc
la libertad de hacerlo asi porque, como el nuevo Académico
nos dice, consideró tal empenno como «propósito vertebral de
su labor en aquel Ministerio, «momento ápice» de su paso por
las Alturas de Gobierno que ahora recuerda «coloreado de le¬
gitimo orgullo».
En otro lugar de ese mismo prólogo recaba para si el mé¬
rito o el demérito resultante de la propia inspiración en estos
terminos: «Mi Decreto-Ley de organización corporativa de 26
de noviembre de 1926 no fué una transacción doctrinal ni una
transposición doctrinal de principios del corporatismo italia¬
no, como aseguran algunos comentaristas absolutamente des¬
conocedores de estas materias.» (Prólogo de La Reforma Cor¬
porativa del Estado.) Y anade con sinceridad rara en quien
juzga su propia obra: «La ley espannola, sin ser absolutamen¬
te original, es una creación sui generis con propia fisonomia
y caracteristicas inconfundibles. Representa un principio de
accion, un prologo, un antecedente de la organización corpo¬
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Real Acade
nia de Ciencias Morales y Politicas